lunes, 7 de abril de 2008

La noche es nuestra

LA NOCHE ES NUESTRA (WE OWN THE NIGHT)
Director: James Gray
Reparto: Joaquin Phoenix, Mark Wahlberg, Robert Duvall…
EEUU - 2007

ARGUMENTO
En 1988 una nueva droga ha revolucionado la noche neoyorquina. Bobby Green es el encargado de uno de los locales de moda en la ciudad. Allí se mueven todo tipo de sustancias alucinógenas y esa actividad delictiva es seguida de cerca por el grupo antidroga de la policía de Nueva York. Tanto el hermano como el padre de Bobby Green forman parte de esa brigada.

CRÍTICA
Viendo La noche es nuestra se tiene la sensación de que muy mala tiene que ser una película sobre el hampa, en cualquiera de sus variedades, para no convencer a los muchos fans del género. La mafia ha dado lugar a tantas y grandes películas que el espectador acaba por idealizar a los capos y matones que ha dado el cine, olvidando a veces que detrás de cada recreación romántica se esconden todo tipo de sanguinarios sin escrúpulos.

La noche es nuestra se centra más en el lado de “los buenos”. Se trata de una buena película que cuenta con varios árboles genealógicos más que interesantes, para que la historia exprima todo el jugo posible de cada una de las familias protagonistas. Así mismo, todos y cada uno de los actores protagonistas están perfectos en sus respectivos papeles, con mención especial a Joaquin Phoenix, un hombre que tiene todo el talento del mundo como para empezar a coleccionar Oscars y demás premios de un momento a otro.

Por si fuera poco, la película cuenta con dos de esas grandes escenas que impiden al espectador alejar su mente de lo que está ocurriendo en pantalla. Para los que vayan a verla, que presten atención a la visita de Joaquín Phoenix al piso donde se controla la droga, y a la espectacular persecución de coches en mitad de un tremendo diluvio.

El problema es que, aparte de tanta corrección narrativa e interpretativa, la película no aporta nada nuevo a lo que ya hemos visto antes. No es una película que vaya a sorprender al espectador en ningún sentido, y por eso a lo mejor se olvida antes que otras de menos calidad. Además, el guión tiene algún que otro giro fácil que hace que todo pase más como en las películas que como en la vida real. Ejemplo de ello es ver a Joaquin Phoenix convertirse en policía de la noche a la mañana.

ABOGADO
El planteamiento de la historia es impecable, tanto por la presentación de los personajes como por la recreación del ambiente ochentero, con uniformes y decorados que recuerdan a las grandes películas y series policíacas de la época. Nostalgia y buenas maneras se unen para que el espectador no tarde más de dos minutos en conectar con la película.

FISCAL
Puestos a comparar, la mafia rusa de Promesas del este parecía mucho más auténtica y peligrosa. En La ciudad es nuestra todo es más típico, más previsible.

VEREDICTO
Bien Alto
(La gente saldrá satisfecha del cine, pero muy pocos se comprarán el DVD).

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